Nota prensa ACMA con motivo del Día Internacional de la Matrona

“Matronas: Cruciales en toda crisis” es el lema del Día Internacional de la Matrona de este año.

El mundo se enfrenta a crisis cada vez mayores, ya sean catástrofes naturales, conflictos bélicos o efectos del cambio climático. Durante estas situaciones de emergencia, son las mujeres, las niñas y las personas con diversidad de género quienes, a menudo, se enfrentan a los mayores riesgos: complicaciones en sus procesos reproductivos, violencia de género y acceso limitado a servicios esenciales de salud sexual y reproductiva, entre otros.

En estas circunstancias, las matronas son cruciales. Estas profesionales son agentes sanitarios con competencias para proporcionar una respuesta inmediata y de confianza dentro de sus comunidades y para desempeñar funciones en el ámbito de la gestión de los servicios de salud.

Están capacitadas, según la Confederación Internacional de Matronas, para prestar hasta un 90% de los servicios de salud sexual, reproductiva, materna, neonatal, infantil y adolescente (SSRMNIA), también durante crisis humanitarias utilizando un mínimo consumo de recursos.

Algunas de sus competencias con gran valor en situaciones de crisis son:
• Proporcionar partos seguros y atención prenatal y posnatal.
• Proporcionar anticoncepción, atención integral del aborto y atención a mujeres que sufren violencia de género.
• Apoyar la lactancia materna, garantizando que los recién nacidos reciban una alimentación segura, higiénica y confiable en estas situaciones.

Educar y preparar a las comunidades con los conocimientos y herramientas que necesitan para mantenerse seguras y sanas durante las emergencias.

Aunque las matronas son profesionales imprescindibles para colaborar en la resolución de crisis sanitarias, en ocasiones , no participan en la planificación de la respuesta ante las mismas.
Por este motivo, es momento de señalarles como profesionales esenciales y darles reconocimiento, siendo incluidas dentro de los procesos de gestión sanitaria.

Asimismo, se debe preservar su seguridad y facilitar herramientas y recursos que les permitan responder adecuadamente ante situaciones críticas y desafiantes a las que se tengan que enfrentar (protegiendo los derechos de mujeres y niñas, salvando vidas por medio de la atención de partos más seguros…).

A pesar de vivir en un país desarrollado, con las garantías que ofrece nuestro sistema sanitario, la historia reciente nos demuestra que pueden acontecer desafíos históricos e inesperados para los cuales hemos de estar preparados.

Otro tipo de crisis más cotidianas en nuestro medio, y a veces no reconocidas, son las relacionadas con la salud sexual y reproductiva de las mujeres. En estos casos, también se hace necesario contar con una matrona accesible que les asista y acompañe en procesos de mayor vulnerabilidad, resolviendo dudas y dejando que expresen sus preocupaciones en este ámbito, y de este modo, cuidar su estado emocional.

Embarazos no deseados, diagnóstico de infecciones de transmisión sexual, pérdidas gestacionales, problemas o dificultades durante la gestación, parto y puerperio, lactancias dificultosas, cambios físicos y psicológicos durante el climaterio y detección de cualquier tipo de violencia contra la mujer son, entre otras, situaciones estresantes que requieren la intervención especializada de una matrona que pueda valorar el estado de salud de las mujeres, fomentar su autocuidado y derivar a otros profesionales especializados si es necesario. Todo ello se traduce en un acompañamiento especializado e individualizado que protege los derechos de las mujeres en el ámbito de la salud sexual y reproductiva.

Es esencial garantizar que, en todo momento pero especialmente ante situaciones de crisis, todas las mujeres cuenten con el acompañamiento profesional y cercano de una matrona.